Esta cirugía es llamada también la “CIRUGIA DE LA MIRADA”, o cirugía de elevación de las mejillas.
Es indicada en pacientes entre los 35 y 45 años , que empiezan a sentir los efectos de la gravedad y a ver una caída de los tejidos de los pómulos y las mejillas, y los surcos alrededor de la boca, y que todavía no tienen exceso de piel suficiente como para pensar en una cirugía de rejuvenecimiento o ritidoplastia.
Se realiza a través de unas incisiones muy pequeñas dentro del cuero cabelludo, por donde se introduce un endoscopio que nos permite visualizar todas las estructuras internas sin dañarlas y llegar hasta los pómulos, en donde se colocan puntos internos especiales de suspensión que permiten que los tejido regresen a su antigua posición y se recobre ese aspecto juvenil perdido. Otro de los efectos que se logra es el alargamiento de los ángulos externos de los ojos para obtener una forma almendrada más juvenil.
Se realiza con anestesia general, dura entre 2 y 3 horas, es ambulatoria. Requiere 1 semana de incapacidad.